Hace unos cuantos días el genial Forges describió en su viñeta habitual de "El País" el sentir de millones de personas en todo el territorio español y parte del extranjero.
A los problemas habituales de los últimos tiempos (crisis, paro, recortes, leyes antitabaco, decretos de "ahorro tocapelotas energético", corrupción...) se unen la tragedia de Japón y las revoluciones en distintos países, subrayando especialmente lo que está pasando en Libia. Sobre este particular quiero apuntar un detalle personal: ¡NO LO ENTIENDO!, a Gadafi le vendimos armas hasta la saciedad, el "mundo civilizado" ha hecho todo tipo de negocios con él, ahora no se le tilda de dictador ni se considera enemigo, pero se movilizan tropas para proteger a los ciudadanos (me parece perfecto), aunque no se le intenta derrocar, al menos de cara al público; no me extrañaría que, una vez pasada la revuelta y si Gadafi sigue en el poder, se volviera nuevamente a explotar el "negocio Gadafi".
La verdad es que, viendo lo que sucede a nuestro alrededor, prefiero quedarme con la visión de Forges y de paso reirnos un poco de nosotros mismos.
Desde luego, ante cuestiones así siempre es mejor intentar tomarlo con humor, que para eso podemos disfrutar de un puñado de genios que nos ayudan a ver el lado irónico de la vida.
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